Ha comenzado la campaña de recogida de naranja amarga en los árboles situados en calles, plazas, parques y edificios de titularidad pública del municipio.
Esta acción se realiza todos los años y ayuda, además de conservar la estética de nuestro municipio, a limpiar los árboles y la vía pública.
Por otro lado, la recogida de las naranjas procedentes del viario público supone un ejemplo de #economíacircular ya que las naranjas recogidas serán aprovechadas para distintos fines, como la creación de mermelada, para la producción de gas o para la generación de energía eléctrica, entre otros provechos.
Las naranjas que no puedan ser valorizadas mediante codigestión se destinarán a compostaje, cerrando de esta forma el ciclo del carbono y devolviendo éste al suelo.